La película «El Resplandor» es considerada una de las obras maestras del cine de terror y una de las películas más icónicas de Stanley Kubrick. Sin embargo, detrás de las cámaras, la producción fue todo menos un camino de rosas. La actriz Shelley Duvall, quien interpretó a Wendy Torrance en la película, sufrió una experiencia traumática durante el rodaje que la afectó para siempre.

La producción de «El Resplandor»

La producción de «El Resplandor» comenzó en 1978, después de que Kubrick adquiriera los derechos de la novela de Stephen King del mismo nombre. La película se rodó en los estudios de cine Elstree en Inglaterra y en localizaciones cercanas.

Kubrick, conocido por ser un perfeccionista, tenía una visión muy específica de cómo quería que se rodara la película. Esto significaba que el rodaje se prolongó durante más de un año, lo que resultó en un presupuesto que superó los 19 millones de dólares.

Durante el rodaje, Kubrick mantuvo un control absoluto sobre cada aspecto de la producción, desde el guion hasta la música y la edición. También era conocido por ser un director muy exigente con sus actores, y Shelley Duvall no fue la excepción.

La tortuosa experiencia de Shelley Duvall

Duvall sufrió una experiencia traumática durante el rodaje de «El Resplandor». Kubrick la sometió a una presión constante y la obligó a repetir las escenas una y otra vez, a veces más de 100 veces. La actriz tuvo que soportar largas horas de trabajo, y el estrés y la fatiga finalmente tuvieron un efecto negativo en su salud mental.

En una entrevista posterior, Duvall describió el rodaje como una «experiencia de pesadilla». Afirmó que Kubrick la trataba con falta de respeto y que la hacía sentir como si estuviera siendo humillada públicamente. También reveló que tuvo que lidiar con el acoso de los fanáticos de la película, que se obsesionaron con su personaje y la acosaron después del lanzamiento de la película.

Después del rodaje, Duvall sufrió una depresión y se retiró del mundo del cine durante varios años. En una entrevista reciente, reveló que todavía lucha contra problemas de salud mental y que ha sido diagnosticada con trastorno bipolar.

La relevancia de la historia de Shelley Duvall

La historia de Shelley Duvall es un ejemplo poderoso de cómo el acoso y el estrés laboral pueden tener un impacto duradero en la salud mental de una persona. También destaca la importancia de tratar a los actores con respeto y dignidad en el lugar de trabajo.

Además, la historia de Duvall es una muestra del poder que tienen las películas y el impacto que pueden tener en la vida de las personas. «El Resplandor